Soñar a los pies de la Catedral

La compañía de teatro Mira de Amescua interpreta La vida es sueño, de Calderón de la Barca

05 jun 2017 / 11:17 H.

La vida es sueño, y los sueños, sueños son”. Los famosos versos de Pedro Calderón de la Barca se recitaron a los pies de la Catedral de la Asunción. El público disfrutó de la obra La vida es sueño, en una interpretación lo más fiel posible al texto original del siglo de oro. Los asientos disponibles se llenaron para demostrar que la cultura continúa muy viva tras la reciente Noche en Blanco que atrajo a cientos de ciudadanos a los lugares “candentes” del arte en todas sus formas plásticas.

Según su director, Antonio Robles, a pesar de la gran variedad de lecturas de la obra, hay una “que nadie puede obviar, la del triunfo de la ética”. “Segismundo, el protagonista, nunca estará seguro de si lo que vive es real o no, pero sí de que, ‘aún en sueños, no se pierde el hacer bien”, recita el director, y concluye: “Esa es la gran lección”.

El público disfrutó de cada instante de la interpretación de los artistas. Armando Ordónez, como Segismundo, y Esther Rodríguez, como Rosaura, guiaron a los jiennenses por una historia en que la fantasía e irrealidad se mezclaron con una tensión dramática continua. Un relato con más de cuatro siglos de antigüedad pero que, a pesar del lenguaje, conserva una esencia actual y siempre presente. Un espíritu renovado que preservó la compañía teatral bajo el manto nocturno.