Piezas de hoy y de siempre

El Cuarteto de La Habana entusiasma con su música en el Castillo de Canena

24 jul 2016 / 11:53 H.

El Festival de Música Villa de Canena, que conmemora este año su veinticinco aniversario, ha dejado grandes momentos desde que comenzó el pasado 8 de julio, con la Banda Sinfónica San Indalecio de Almería, que sorprendió con obras como El torico de cuerda y El Olimpo de los Dioses. El día 15 fue el turno de la Orquesta de Cámara y el Coro Castulum, que interpretó piezas como La Barcarola y Los Nardos.

Después de dos noches mágicas llegó el turno del Cuarteto de La Habana. Su actuación no defraudó la expectación creada ante el público. El grupo, liderado por Jorge Hernández, ante un patio de columnas del castillo abarrotado, conquistó, primero, al personal con las curiosas variaciones del Happy Birthday de Peter Heidrich, dedicado a las “bodas de plata” del festival, para continuar con el Cuarteto número 1 de Héctor Villalobos, uno de los mejores compositores de Latinoamérica y con toda una lista de maravillosas obras, muy conocidas por cualquier amante de la música clásica y moderna, tales como Michelle, Oh qué será, Oblivión (A Piazzolla), La bella cubana o el Summertime (Gershwin) entre otras. Tras muchos aplausos y vítores, la música de la inefable Pantera Rosa fue la “guinda final”.

Fundado en 1980 en La Habana por la influencia de Leo Brouwer, con la idea de difundir la música iberoamericana, el cuarteto ha recibido grandes premios de interpretación, ha participado en importantes festivales y ha editado varios discos, el último de ellos dedicado a Los Beatles. Por otro lado, tras esta formación, anoche estaba programada la intervención de la Orquesta de Cuerda Balanguía, con obras como Moon River, Tatuaje y La pantera rosa, y cerrará la programación, el 30 de julio, a las diez de la noche, en el Auditorio de Fuentenueva, la banda de la Asociación Musical de Canena. Para la ocasión el público podrá escuchar, entre otras piezas, El baile de Luis Alonso o Viva el pasodoble.

El XXV Festival de Música Villa de Canena se convirtió, con el paso del tiempo, en un referente nacional por su calidad y el respaldo de público, algo que se vuelve a poner de manifiesto en esta edición.