Pablo López ofrece “fuego”

E l ambiente en Baeza huele a algodón de azúcar, suena a rumba y parece estar adornado de farolillos. No, la ciudad del renacimiento no ha adelantado su feria, o al menos en parte, porque sí ha decidido calentar motores y por todo lo alto. El responsable es uno de los músicos del momento en el panorama español, el malagueño Pablo López.

El artista llegó a la ciudad para aterrizar en la plaza de Santa María, escenario único para que se luciera a lomos de su aliado inseparable, el piano. Allí se mezcló su talento con uno de los rincones más bonitos de un municipio con historia. Como protagonista estelar, los temas de su último trabajo, Camino, fuego y libertad dentro de su nueva gira, bajo el título Tour Santa Libertad. Eso sí, los asistentes no le cantaron eso de “fuera, vete de mi casa”, sino que lo acogieron como uno más para exprimir cada una de las notas que sonaron durante la actuación. El tampoco los echó de su patio, sino al contrario, miles de personas quisieron asistir a uno de los conciertos del año en la ciudad que dejaron una imagen única, con una plaza a rebosar. Una vez todo preparado, hasta la nobles piedras renacentistas tuvieron que contener la emoción con las canciones del artista y sus músicos que supieron llegar a los asistentes con temas del último álbum así como el repaso de otros de sus éxitos. El camino fue el primer tema, aunque la distancia con el público se quedó en mínimos ya que la cercanía de este y las ganas de dejar un recuerdo mágico del malagueño marcaron una estampa difícil de olvidar.

También hubo momento para rendir homenaje a la libertad, cuya letra tiene versos como Santa libertad, muéstrame el camino, Dame una razón para pensar que sigo vivo, y los asistentes lo estuvieron y lo demostraron con las mejores entonaciones de sus gargantas. El momento más íntimo y hasta quizás más intenso vino con Lo saben mis zapatos. También hubo fuego, con su tema El Incendio. Pocas palabras quedan por añadir, solo música y más música que llega al alma para erizar la piel y dejar ganas de mucha feria.