Mediapro organiza un ERTE

Mediapro comunicó a su plantilla la puesta en marcha de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para 1.200 trabajadores en España. La medida es “necesaria” y temporal y se tomó como consecuencia de que su actividad se vio “paralizada” por la expansión de la pandemia del coronavirus en todo el mundo. De este modo, los trabajadores de Mediapro incluidos en el ERTE recibirán la prestación de desempleo del Estado. Además, la empresa fundada por Jaume Roures complementará hasta el 100% los sueldos de los empleados con salarios más bajos y hasta el 75% los del resto. Asimismo, se aplicó un plan de medidas de ahorro “muy estricto” y que los directivos con sueldos superiores a 80.000 euros lo reducirán entre un 15 y un 25%, mientras que los máximos responsables de la compañía se rebajarán el salario un 50%. En la actualidad sus equipos participan en la producción de 16 ligas de fútbol en todo el mundo que fueron suspendidas, así como los proyectos cinematográficos, de ficción o entretenimiento, entre otras áreas de actividad de la compañía. El grupo audiovisual cuenta con una plantilla de 7.123 profesionales en 58 sedes repartidas en 38 países de todo el mundo. Fuentes de Mediapro apuntaron que cada delegación de la compañía adoptará las medidas en función de la legislación vigente en cada mercado. La aparición del coronavirus en China ya afectó a la sede que Mediapro en el país asiático y, ante la aparición de los primeros casos en Europa, un grupo de seguimiento interdepartamental comenzó a implementar los planes de contingencia de cada unidad de negocio, al mismo tiempo que daba la información a sus equipos de profesionales para que tomasen todas las medidas de prevención. Cabe destacar que eso no evitó que se produjeran contagios por Covid-19 en el rodaje de “Alardea”, producción para la radiotelevisión vasca a cargo de “K2000”, una de las marcas dentro del grupo. Una de las contagiadas era la propia protagonista de la miniserie, Itziar Ituño.

Mediapro no es la única empresa que tuvo que recurrir al ERTE. Ikea presentó un ERTE que afecta al 83% de sus trabajadores en España, donde cuenta con cerca de 8.000 personas, debido al impacto del coronavirus y la obligación de cerrar establecimientos. La compañía sueca cerró sus tiendas el pasado 14 de marzo. Así las mantendrá hasta que finalice el estado de alarma, decretado hasta el 11 de abril. El procedimiento afecta a los empleados de establecimientos comerciales pero no a la plantilla del centro logístico de Valls, en Tarragona, los de oficinas centrales, venta online y atención al cliente. Tampoco al personal de mantenimiento y seguridad. Primark no resistió la tendencia del sector y presentó el lunes un ERTE para el 98% de su plantilla actual en España; alrededor de 6.000 personas. La empresa se acogió al paquete de medidas anunciado la semana pasada por el Consejo de Ministros y justificó el recorte “por causas de fuerza mayor”. La medida se prolongará hasta que se decrete el fin del estado de alarma. Según informaron los sindicatos, la intención de la empresa es complementar la prestación por desempleo hasta llegar al 100% del sueldo mensual normal durante el mes de marzo. Para abril, habrá que volver a negociar. Las aerolíneas también se suman, como es el caso de Iberia, que presentó un ERTE para 13.900 de sus 17.000 empleados en España. El despido se produce a consecuencia del impacto del coronavirus en la industria aérea y está previsto para un periodo de tres meses. El recorte en las oficinas, servicios centrales y componentes de la filial del grupo IAG será del 70%, mientras que en el área de motores será inferior al 60%. Vueling se sumó a la avalancha de expedientes ante la caída de la demanda por el coronavirus. Aplicado bajo “causa de fuerza mayor”, el ajuste afecta a sus 3.800 empleados y tiene vigencia hasta el próximo 30 de junio. La rebaja se produce en un momento en el que la aerolínea de bajo coste solamente tiene en el aire uno de cada cuatro vuelos.