Canciones que beben del elixir de la eterna juventud

Desplegaron un repertorio impresionante, que incluía algunas de sus canciones más recordadas por el público jiennense. Algo que, por otro lado, suele ser una constante en sus recitales, ya que el público les pide siempre sus temas favoritos.

En aquella ocasión, el recital de Jaén incluía títulos como Sólo pienso en ti, Bailarina, El hombre del piano (Piano man), Luna, Desde mi libertad, Ay amor o Balance. Un repertorio extraído de distintos álbumes de auténticas joyas que forman parte del bagaje discográfico colectivo de sus seguidores que, en la provincia de Jaén, son legión.

Muchas de las canciones de Ana y Víctor o de Víctor y Ana, que tanto monta, tienen esa virtud, que calan hondo y se tornan pegadizas, fáciles de asimilar. A veces, según las épocas, el público disfruta del contenido social del verso, como es el caso de La muralla de Quilapayún, versionada por Ana Belén en los 80, o del tema de Víctor Manuel, En la planta 14, que caló hondo por estas latitudes olivareras y mineras. El propio cantante se sorprendió cuando, en el concierto que ofreció en la feria de septiembre, de 1980, de Beas de Segura, el público le pidiese ese viejo título de sus primeros discos. Eran tiempos de tránsito, de transición. Es una canción narrada.

La letra arranca así: “En la planta 14 del pozo minero de la tarde amarilla, tres hombres no volvieron. Hay sirenas, lamentos acompasados, ayes ala boca del pozo...”. En Linares también caló hondo por razones obvias. En aquellos años eran frecuentes los accidentes laborales en las galerías mineras por explosiones de gas grisú. 

Tanto la capital como diferentes municipios de la provincia, como Torredonjimeno, Torreperogil, Villacarrillo, Vilches, Bailén, Beas de Segura, Huelma, Linares, Martos, Cazorla, Campillo de Arenas, Peal de Becerro, Úbeda y Baeza, han puesto a disposición de uno u otro cantante, en diferentes ocasiones, sus ecenarios y su público.

La última vez que la pareja cantó en la capital, fue el 20 de octubre de 2001, con su gira Dos en la carretera. Para el público que abarrotó en el Auditorio de La Alameda fue una gozada. El recital incluía sus éxitos más sonados, lo mejor de sus respectivas trayectorias. Títulos como Solo pienso en tí, Peces en la ciudad, Solo le pido a Dios, Contamíname o el super éxito que ve pasar el tiempo, La puerta de Alcalá. El público jiennense, entusiasmado, cantó todos los estribillos, hasta el punto de conectar con la pareja, que estuvo sembrada.