Fusión perfecta de sones de ambos lados del charco

Dicen que cuando dos productos están buenos, su mezcla tiene que hacer una comida exquisita, aunque el resultado no siempre cumple las expectativas. En el caso de Amarraditos, el nuevo espectáculo que aúna a Criollo, con sus sonidos de influencia argentina y la voz lírica de Miguel Ángel Ruiz, y FlamenCubeando, con Curro Pérez interpretando las letras con su particular estilo, la mezcolanza es perfecta. No en vano, juegan con ventaja al compartir músicos —Luis Delgado, padre e hijo, y Fernando Delgado—, lo que facilita parte del trabajo.

El Teatro Darymelia, con el patio de butacas y el primer anfiteatro llenos, recibió a los cinco artistas con un sonoro aplauso que ya dejaba entrever que llegaban entregados y conociendo lo que podían esperar de una noche donde los sones de un lado y otro del Atlántico jugaron a entremezclarse para bailar en los oídos de los presentes y hacerles disfrutar de un espectáculo que no decepcionó a ninguno de los asistentes.

El punteo de Luis Delgado fue lo primero que se escuchó sobre las tablas antes de dos voces tan diferentes como son las de Ruiz y Pérez interpretaran La flor de la canela y Una cabeza, mostrando los primeros destellos de esta nueva propuesta musical que une canciones tan dispares entre sí pero que demostraron funcionar a la perfección en su interpretación acompañada de instrumentos de cuerda, percusión y teclado.

Después de una primera tanda de dos canciones, fue el turno de que Miguel Ángel Ruiz se quedara solo sobre el escenario junto a los músicos para interpretar Chacarera de un triste, a la que siguió Nada. Sones argentinos que con la melodía interpretada y la voz lírica embaucaron a los presentes, trasladándolos al otro lado del océano Atlético sin salir del céntrico Teatro Darymelia.

A estas dos canciones siguieron otras cuatro del repertorio del espectáculo Criollo, antes de dar paso, de nuevo, a Curro Pérez y las letras con sones más flamencos que seleccionaron de FlamenCubeando para esta ocasión. Nostalgias, Lucía, Aquellas pequeñas cosas... Letras que no podían faltar en este novedoso espectáculo que presentaban en casa pero que a buen seguro dará alegrías por buena parte del globo.

El último bloque musical volvió a tener a los dos cantantes sobre el escenario para interpretar cinco nuevas canciones. Amarraditos precedió a Alfonsina, las voces lírica y aflamencada se entrelazaban, dando lugar a algo nunca visto, que sonaba muy diferente, pero que funcionaba, como se vio con la reacción del respetable y su aplauso casi infinito.