Curro Díaz sufre una peligrosa cogida en el coso de Manzanares

El matador es trasladado hasta una clínica de Albacete por una herida en la ingle

16 jul 2017 / 11:09 H.

E l linarense Curro Díaz sufrió una cornada en la zona de la ingle izquierda, de veinte centímetros, y en el mentón, mientras toreaba en el coso de Manzanares, en Ciudad Real. Tras la cogida, el torero se desvaneció en la enfermería de la plaza y tuvo que ser trasladado a la Clínica Santa Cristina de Albacete, para su recuperación tras ser intervenido de las heridas. La cogida ocurrió mientras faenaba con la muleta, para intentar animar a un toro que no acompañó y se le vino encima, arrollándole por el lado izquierdo. Además le propinó un golpe en la cara, lo que le provocó que se le ensangrentara. Fue intervenido tras comprobar la gravedad de la herida por el cirujano jefe de la plaza de toros de Albacete, el doctor Pascual Masegosa, que lo trató con anestesia raquídea con ampliación de la lesión para comprobación de lesiones, limpieza, colocación de drenajes y cierre.

Tras el percance, la corrida de Manzanares tuvo que ser lidiada entre el francés Juan Bautista y Rubén Pinar, con astados de la ganadería de toros de Mollalta. El diestro Rubén Pinar cortó cinco orejas y salió a hombros de la plaza, en una tarde en la que Curro Díaz representó la otra cara de la moneda y provocó un gran susto a todos los allí presentes, y grandes momentos de tensión. El torero Juan Bautista consiguió una oreja y silencio, a pesar de sus múltiples intentos por manejar los toros. Curro Díaz, sin embargo, no pudo conseguir nada al ser embestido por el primer toro, por lo que se quedó sin opciones de mejorar una tarde que se presentaba complicada para el matador, con un gran susto para el linnarense, cuyo toro tuvo que terminarlo Bautista. El primer toro estuvo rebrincado y sin entrega, segundo, tercero y cuarto nobles y con calidad, ovacionados en el arrastre, quinto y sexto sosos y faltos de fuelle y garra.

Habrá que esperar para ver como evoluciona el torero, que ya la semana anterior tuvo un susto con uno de sus banderilleros, Pirri, durante su corrida en Pamplona, de la que todavía se recupera. Curro Díaz tiene una gran cantidad de corridas programadas hasta el mes de septiembre, que ahora están en duda hasta su recuperación completa, según evolucionen las diversas heridas sufridas en el festejo celebrado en la histórica plaza de Manzanares.