La música se viste de luto, al igual que todos los baezanos, por el repentino fallecimiento de Martín Morales, quien fuera director de la Banda de Música de Baeza, en la cual ingresó en 1966. Fue un vecino querido, dentro y fuera de su ciudad. No solo fue un apasionado músico, sino que, además, se dedicó a la labor didáctica de la misma como profesor durante más de tres décadas. Hasta la fecha, impartió clases en el instituto San Juan Bautista de Navas de San Juan. También fue un gran compositor de pasodobles, como Toros para Todos —dedicado al programa televisivo del mismo nombre en Canal Sur—, El andujano y Educar. En diciembre de 2001 recibió el Premio Casa Úbeda en Madrid y, al año siguiente, obtuvo el mismo galardón junto con la Orquesta Sinfónica y la Coral Baezana por la extraordinaria interpretación del Miserere, de Hilarión Eslava, en la Catedral de Nuestra Señora de la Almudena de Madrid. Hoy todos los instrumentos de orquestas y sinfónicas guardan silencio por su memoria. Descanse en paz, maestro Martín Morales.

El Ayuntamiento de Baeza declaró un día de luto oficial por el fallecimiento de Martín Morales, motivo por el que las banderas de los edificios municipales ondearan a media asta y con crespón. Por esta razón, el cronista oficial de la ciudad, José Luis Chicharro, afirmó: “Fue un hombre que aportó mucho y se entregó a la música. Fue fundamental en el panorama musical de la ciudad durante los últimos 30 años. Además de maestro de la banda, fue director del Miserere. Se prestó a realizar numerosos conciertos. También destacó su faceta de compositor a través de grandes piezas relacionadas con personajes de Baeza. Les gustaba interpretarlas. Durante la feria, él dedicaba los pasodobles siempre a personas especiales para él. Para los baezanos, esta es una gran pérdida, cualitativa y cuantitativa, pues estaba en muchos sitios y siempre trabajando por los talleres de música. Estaba en su momento más pleno y aún le quedaba mucho de sí. Le agradecemos su dedicación a esta área”.

La música y sus intérpretes guardan luto por la memoria de Martín Morales, a quien muchos recuerdan con cariño. Es el caso de Víctor Pérez, exdirector de la Sociedad Filarmónica de Jaén y miembro de la misma, quien destacó: “Todos los músicos de Jaén lo conocíamos por el Taller Provincial de Música, que cumplió, este verano, su XXX aniversario. Él fue director del Miserere. Su pérdida es irreparable. Nadie se lo esperaba. Yo conviví mucho con él y lo vi muy sano y fuerte siempre. Fue muy querido en Baeza y en la provincia”.

María Luisa Barrera, integrante de la formación arjonera Lira Urganovense, habló en nombre de su agrupación para dedicar unas palabras al compositor baezano por su fallecimiento, e indicó: “Fue una persona que, a todos los que fuimos a su taller provincial, demostró la amistad dentro del mundo de la música. Junto a él, pudimos conocer mejor nuestros instrumentos. En tan solo unos días, conseguía crear una unión entre todos que parecía que habíamos estado juntos toda la vida. Establecía mucha cercanía y comodidad entre los miembros de este encuentro. Su pérdida, para nosotros, ha significado mucho. Fue un hombre muy querido en la provincia. En Arjona estuvo, como director invitado, hace unos años. Fue muy cariñoso”.

El poeta y profesor Salvador García sintió la muerte de su amigo, Martín Morales, y manifestó: “Fue una persona afable y cariñosa, a la par que creativa. Tuve una relación muy cordial con él. Nos jubilamos a la vez. Su sentido del humor y manera de aprovechar la vida, en positivo, destacaba mucho de él”.

Uno de sus allegados, Juan Manzanares, comentó emocionado sobre su amigo, Martín Morales: “Unas pocas palabras no pueden definir la naturaleza de este hombre, que era y es muy querido por todos los baezanos, no solo por su gran trayectoria profesional dentro de la música, sino también como persona. Se ganó el corazón de todos sus paisanos”.