M odestia aparte, faltaría más, aunque tengo que escribirlo en esta columna titulada La Mirilla a bombo y platillo. Jaén, toma ya, ha tenido tantos nombres como olivos, y valga la exageración. Apunten, tomen nota y saquen provechosas conclusiones históricas, tan verdaderas como este reparador sol que me está calentando en este mes de noviembre. Estos son los nombres de Jaén: Elinga, Auringis, Aurgi,...