El asistente virtual gastronómico

Ask Vicente sugiere al usuario dónde comer a través de Whatsapp y está presente en toda España

08 mar 2016 / 18:32 H.

Un grupo de emprendedores sevillanos ha creado Ask Vicente, el primer asistente virtual gastronómico de España, que recomienda por Whatsapp, de manera gratuita, bares y restaurantes acorde a tus preferencias. En una nota, sus creadores han recordado que el lema de dicha startup es Donde come Vicente, come la gente y mediante esta aplicación ya proporciona sugerencias a lo largo de toda España. Basta con escribir “¡Hola Vicente!” a través de Whatsapp al número +34 693732020 para que el asistente virtual comience la conversación y recomiende al usuario un establecimiento acorde a sus peticiones.

Sus promotores han precisado que “no se trata de una simple conversación a través de Whatsapp, ya que detrás de esta cuenta se encuentra un equipo gestionando las recomendaciones del servicio a través de una plataforma interna”. Han añadido en ese sentido que “la automatización de las respuestas es una de las claves del proyecto, que se apoya en la inteligencia artificial”. Esta joven empresa sevillana que resultó ganadora del Primer Startup Weekend de Turismo y Gastronomía y que desde entonces está siendo financiada por un inversor internacional. Ask Vicente usa el comercio conversacional, una tendencia en alza que ha sido extrapolada desde EE UU. Sus creadores, María Romero y Paco Escamilla, de 26 y 25 años respectivamente, aseguran que a la semana de la puesta en marcha del servicio ya se habían cumplido parte de los objetivos marcados para un año. María Romero explica que “la primera fase del proyecto era sólo dar el servicio en Sevilla pero vimos que nos empezaron a llegar peticiones de toda España en cuestión de horas, fue algo muy gratificante. Este servicio está siendo de gran utilidad porque los usuarios no tienen que pararse a buscar un establecimiento en la zona que se adapte a sus requisitos y exigencias”. Por su parte, Paco Escamilla, desarrollador de la parte tecnológica del proyecto, asegura que están “dando un paso de gigante hacia el futuro porque implantar una inteligencia artificial es un proceso complicado y costoso. Hay que enseñarle día a día para que llegue a tener la autonomía de responder por sí sola cuando se repitan ciertos patrones, como la ciudad y el precio, entre otros parámetros”. Entre los objetivos a medio plazo de esta empresa está ofrecer el servicio en inglés para los turistas y expandir el negocio a otros países.