Antonio Ruano deja la vicepresidencia de la CEJ

Antonio Ruano dimite como vicepresidente de la Confederación de Empresarios de Jaén (CEJ). La junta directiva —a la que asistió— escuchó que era voluntad irrevocable y lo justificó como una decisión para evitar cualquier daño a la imagen de la CEJ mientras que defiende, con total independencia, su honorabilidad e inocencia dentro del procedimiento judicial de la Cámara de Comercio e Industria de Jaén, en el que figura como investigado.

El presidente, Manuel Alfonso Torres, aceptó la renuncia. Le agradeció los años de dedicación en la defensa de los intereses de los jóvenes empresarios y de los nuevos emprendedores. Además, resaltó que antepusiera los intereses de la organización a los suyos. Precisamente, la junta directiva despidió a Antonio Ruano con un aplauso que agradecía su trabajo durante este tiempo.

Fue en una junta directiva a la que acudió el presidente de la Diputación Provincial, Francisco Reyes, que no estuvo durante la dimisión de Antonio Ruano, sino que, al igual que realizan todos los representantes públicos que acuden invitados a las juntas directivas, se incorporan más tarde dentro de un espacio que sirve para conversar sobre los proyectos determinantes para la provincia. Francisco Reyes —antes de entrar— afirmó que no era la primera vez que acudía: “Vengo de buen gusto para escuchar a los empresarios y para fortalecer los lazos entre la CEJ y la Diputación. Los emprendedores son los que crean empleo, pero quiero que sepan que tienen el respaldo y la colaboración de esta Administración. También los invitó a usar foros, como el Consejo Económico y Social o el Consejo del Olivar, para plantear sus ideas y propuestas.

El presidente de la CEJ, Manuel Alfonso Torres, resaltó que la Diputación es un claro ejemplo de pago —antes de 30 días— y que se muestra como la “gran empresa” de la provincia. “Tengo palabras de elogio por el buen trato que siempre nos da y por la labor que realiza en los 97 municipios”, concluyó.