Albóndigas
en salsa
La albóndiga, término que procede del árabe “al-bunduqa” (la bola), se realiza con carne picada, generalmente de res, pescado o vegetales, mezclada con huevo y condimentos, como perejil, cominos, ajo,... Son unas de las recetas más tradicionales de nuestra gastronomía, un plato consumido en todo el país y con multitud de variantes a la hora de su elaboración. Fueron los árabes quienes enseñaron a los europeos a preparar este guiso y lo extendieron vía oriente hacia Asia. Según la leyenda, el sultán Suleimán el Magnífico, tras caer de su caballo, quedó con muy pocos dientes. Para que siguiera gozando del cordero, su esposa Roxelana ordenó que en palacio sólo se cocinara carne triturada. Los cocineros se pasaron años preparando berenjenas rellenas, calabacines y, sobre todo, albóndigas. Podemos encontrar multitud de recetas para albóndigas en salsa. Deseo que esta sea de tu agrado.
INGREDIENTES.
500 gramos de carne picada de cerdo y vacuno, 1 huevo grande, 5 dientes de ajo, pan rallado, perejil, azafrán en hebra, sal, vinagre, patatas, 1 kilo de tomates maduros, 1 cebolla, 1 zanahoria, aceite de oliva virgen extra (AOVE).
PREPARACIÓN.
En un bol de cristal, machacar dos dientes de ajo, sal, perejil y azafrán en hebra. Añadir el huevo y batir. Incorporar un poco de agua junto a la carne picada. Mezclar a la vez que se va echando pan rallado, hasta conseguir la textura deseada. Dejar reposar.
Hacer las bolas con las manos mojadas con un poco de vinagre. Así las hacía mi abuela. Freír en abundante aceite de oliva y escurrir en papel de cocina.
En una cazuela, freír en un poco de aceite la cebolla y tres dientes de ajo. Cuando estén pochados, añadir el tomate rallado. Remover de vez en cuando y tapar para evitar que salpique.
Pasados diez minutos, incorporar las albóndigas y dejar hervir a fuego lento cinco minutos.
Como acompañamiento, freír patatas a cuadritos. Y servir bien caliente.
Consejo: en casa, suelo hacer masa de más, para reservar y hacer unas albóndigas más pequeñas que utilizaré para una sopa de albóndigas. Solo tie’nes que preparar un delicioso caldo de pollo casero. Puedes servir la sopa con huevo duro picado con la yema disuelta en un poco de vinagre. ¡Sencillamente deliciosa!