El patrón sale a la calle en una jornada de no festivo local
La ciudad volvió a su cita con su patrón, Santo Domingo de Silos, en una jornada despejada y de temperaturas agradables, lo que hizo que buena parte de los vecinos se dirigieran a los tajos de aceituna para trabajar. Por primera vez en los últimos años, al coincidir con un sábado, la jornada no fue fiesta local. De hecho, el Ayuntamiento había optado por poner en rojo un día en las Cruces de Mayo.
El acto central de la celebración fue la procesión del santo. El recorrido, con salida y llegada en la iglesia de las Angustias, discurrió por las calles Angustias, Ramón y Cajal —Caridad—, El Llanillo, Alonso Alcalá —Braceros— y el entorno de la Plaza del Ayuntamiento. Como es tradición, la Corporación Municipal bajo mazas estuvo en el cortejo. El acompañamiento musical corrió a cargo de la banda de la Asociación Pep Ventura. Como elemento especial, este año, en la misa previa al desfile, se tuvo un reconocimiento para el sacerdote Antonio Pérez, hasta hace unas semanas párroco de Santo Domingo de Silos. En la eucaristía, aplicada a los hermanos fallecidos, actuaron el grupo de pulso y púa y el coro de la asociación de antiguos alumnos de la SAFA.
Entre el miércoles y el viernes, a las seis y media de la tarde, se ofició en el templo de las Angustias un triduo preparatorio. De la organización de los actos se encargó el grupo parroquial de Santo Domingo de Silos, que agrupa a casi ciento cincuenta personas. Una de las propuestas fue la edición de un programa, con varios artículos sobre historia.