¿Nuevo horario en la aceituna?

El cambio de huso horario obligaría a que los jornaleros lleguen y salgan más tarde de los tajos

01 sep 2018 / 12:55 H.

Parece que existe consenso en Europa a la hora de determinar que estar adelanto y atrasando la hora, en realidad, no es nada útil. Por eso, ayer el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, anunció que el Ejecutivo comunitario propondrá la eliminación del cambio de hora bianual en toda la Unión Europea. Alega que es lo que han reclamado más del 80% de los 4,6 millones de ciudadanos europeos que han participado en una consulta pública sobre esta cuestión. “Este debate sobre el horario de verano e invierno existe desde hace muchos años. Muchos ciudadanos han participado de este debate. Hemos hecho una encuesta pública, millones (de personas) han respondido que debe prevalecer el horario de verano y así será”, explicó Jean Claude Juncker. Al igual que ocurre con la PAC, los temas que se debaten en Bruselas suenan a algo lejano en Jaén, pero tienen una importancia vital. De hecho, si prospera la petición —que parece que sí— será una auténtica revolución para el campo jiennense. Los representantes de los agricultores creen que adoptar el uso horario de verano será positivo, pero habrá que cambiar costumbres que están muy arraigadas en la provincia.

En principio, la Unión Europea pensó en que lo mejor era no estar adelantando y atrasando la hora. Por eso, decidió fijar un uso horario. Hay dos: el de invierno y el de verano. El primero conlleva atrasar una hora, mientras que el segundo consiste en adelantarla. Hasta finales de octubre, Europa está en el uso horario de verano. La idea más común fue adoptar el de invierno, simplemente, porque era el que tradicionalmente se ha tenido en Europea. En cambio, cuando se le ha preguntado a la gente, los europeos han respondido —por amplia mayoría— que nos les importa que amanezca algo más tarde si se logran más horas de luz durante la tarde, es decir, que anochezca después. Y esto conllevaría mantener el horario de verano durante todo el año, es decir, no atrasar la hora en octubre. Por eso, la idea de la Unión Europea es implantar el horario de verano durante todo el año, aunque este otoño todavía no se aplicará.

En el campo. En el olivar será una auténtica revolución, sobre todo, en la campaña de recogida de la aceituna, ya que obligará a las cuadrillas a retrasar, al menos, una hora el inicio de la actividad y, después, tendrán que aguantar más tiempo durante la tarde. Ahora, tradicionalmente, lo normal es que los tajos comiencen a las ocho y media o, generalmente, a las nueve de la mañana. En cambio, con el uso horario de verano, habrá que retrasar, al menos, una hora la recolección. La luz solar y la temperatura de las nueve de ahora será la de las diez. No obstante, dejará de anochecer a las cinco y poco de la tarde, sino que empezará a hacerlo a las seis, por lo que se podrán aprovechar mucho más las tardes. En definitiva, el cambio que propone la Unión Europea conllevaría entrar más tarde al tajo y demorar también la salida. No hay que olvidar que la campaña de recolección se desarrolla a finales de noviembre, en diciembre y a comienzos de enero, que son los meses con menos luz solar.

“Recoger la aceituna no es cuestión de hora, sino de condiciones ambientales y de temperatura. A primera hora, los olivos están helados, por lo que hay que espera un poco para no destrozarlos. El cambio de uso horario sería romper una jornada que lleva toda la vida, por lo que no sé cómo caería entre los trabajadores. Muchos quieren empezar pronto para tener tiempo para hacer cosas por la tarde. En cambio, para los agricultores creo que sería positivo, ya que se aprovecharían mejor las horas de luz y, además, daría más márgenes. Creo que implantar el horario de verano en la campaña costaría, pero fuera de ellos sería todo beneficios”, afirma Juan Luis Ávila, secretario general de COAG.

El secretario general de UPA, Cristóbal Cano, insiste en la misma idea: “Haría que en la campiña se empezara a las diez de la mañana y en las sierras hasta a las once, pero daría más márgenes por la tarde. Si se tiene en cuenta que existe una agricultura familiar muy implantada, creo que para los pequeños propietarios de la tierra sería beneficioso. Tendrán tardes más largas que podrían aprovechar mejor y compaginar con otras labores. En cambio, sí que conllevaría cambiar las dinámicas de trabajo en la recolección. Habría que empezar y acabar más tarde”.