Los agricultores tienen fe en que el olivar haga más aceite

Las cuadrillas retrasan la salida al campo ante el buen tiempo y la última lluvia

08 nov 2017 / 09:43 H.

Pocos recogen aceituna. Hubo tajos que se lanzaron en busca de aceites de oliva de alta gama, al igual que existe una pequeña cuota que busca vírgenes extra de alto nivel. En cambio, más allá de situaciones puntuales, los agricultores no se plantean todavía sacar las cuadrillas al campo. El motivo es que tienen fe en que los olivares todavía sean capaces de producir aceite de oliva, por lo que consideran que se trataría de un grave error quitarle la aceituna. La última lluvia y la ausencia de heladas alimentan esta idea.

“Hace unos años, errar en un punto dolía, pero el precio del aceite de oliva era bajo, por lo que el impacto económico era menor. En cambio, ahora obtener más rendimiento en la cosecha supone mucho dinero. Son casi 12 céntimos, que en muchos kilos se nota”, afirma el secretario general de COAG, Juan Luis Ávila.

Además, continúa: “Nosotros, en mi cooperativa (Torrequebradilla), al principio se habló de abrir el 15 de noviembre. En cambio, con la meteorología que hay y las últimas lluvias, la gente no se plantea esa fecha. Nadie va a salir a recoger. Por eso, se debatirá si comenzamos el 20 o el 27 de noviembre. A mí me da que, al final, será el 27 porque los agricultores están más por esperar”. De hecho, Francisco García, vicepresidente de Infaoliva en España y almazarero en Ibros, añade: “Aquí, hace unos días, la gente estaba curando. Hay mucha gente que sigue. Eso quiere decir que la recolección, al menos, no va a comenzar hasta que pase un mes”. En este cambio de actitud, mucho tiene que ver la meteorología. Las últimas precipitaciones han hecho que las aceitunas de secano —muchas de ellas se encontraban arrugadas por la falta de precipitaciones— hayan cogido más volumen. Se han estirado y se han puesto “más guapas”. Además, los olivareros parten de la hipótesis de que, mientras que no hiele, el olivar es capaz de generar aceite de oliva. Por eso, van a esperar hasta el último momento, ya que muchos creen que el árbol —que no sabe de calendario— cree que vive 15 días atrás, es decir, a mediados de octubre.

Calidad. En este tiempo, no resulta nada favorable decir que los olivareros no van a apostar por la calidad. Jaén tiene caldos de alta gama y, prácticamente, todas las cooperativas y almazaras han recolectado ya aceitunas para hacer caldos de alta gama. En cambio, el aluvión de la recolección no va a mirar tanto la calidad y sí mucho más la cantidad. Lo hace bajo la premisa de que el mercado paga una diferencia de 5 céntimos entre vírgenes y lampantes. Además, muchos de los primeros se han tenido que refinar —hace unos meses— porque tenían mejor salida entre los operadores. No hay que olvidar que el aceite de oliva más consumido en España es el suave y el intenso, que es una mezcla de vírgenes y lampantes.

De ahí que los agricultores van a esperar todo lo que puedan para que el olivar eleve al máximo el rendimiento de la aceituna, pese a que, en ocasiones, haya fruto que se caiga. De hecho, pocos se plantean iniciar la recolección si la meteorología continúa igual.