La reserva de agua crece un 5,5% tras una semana preñada de lluvia

El Quiebrajano, El Jándula y El Encinarejo se acercan a los 200 litros por metro cuadrado

06 mar 2018 / 09:05 H.

La lluvia ya se nota en los embalses. La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) indica que Jaén tiene 765,48 hectómetros cúbicos almacenados en los pantanos, es decir, se encuentran al 32,93% de su capacidad. En cambio, el 21 de febrero, se hallaban al 27,43%, por lo que solo esta semana, que ha venido con nubes preñadas de agua, las reservas de agua de la provincia han crecido un 5,5%. Y lo mejor es que aún aumentarán más porque los ríos van llenos y hay muchos cauces fluviales que van a los embalses y porque la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) indica que las precipitaciones todavía no han acabado. Hasta el domingo, como mínimo, continuará cayendo agua. No obstante, si alguien quiere poner una lavadora e intentar secarla al raso, mañana es la jornada con menos probabilidad de agua —por la tarde será más difícil—.

Comenzó a llover el 26 de febrero. Desde entonces, prácticamente, no ha parado. Sería injusto decir que Jaén ha recogido más de 100 litros por metro cuadrado en estos siete días de lluvia, ya que hay zonas, como Larva o Huesa, que no llegan ni a la mitad. Están en la parte más desértica del mar de olivos. Sin embargo, la mayoría de la provincia sí que ha superado este registro y, además, los pluviómetros del Quiebrajano, El Encinarejo o El Jándula están muy cerca de llegar a los 200 litros por metro cuadrado —la lluvia acumulada en cada municipio se puede consultar en la infografía de esta página en función de los embalses o ríos de referencia—.

Lluvia y viento. Ayer fue una jornada bastante complicada. Llovió, pero tampoco algo exagerado. La Agencia Estatal de Meteorología indica que se recogieron —hasta las nueve de la noche— 26,8 litros por metro cuadrado en Linares, que fue la ciudad que más agua recibió. Baeza tuvo 26; Alcalá la Real, 19,2; Cazorla, 19; Bailén, 16,8, Villanueva del Arzobispo; 17,6; Torres de Albanchez, 12,2, y Jaén, 14. Sin embargo, una vez más, las rachas de viento hicieron que las precipitaciones causaran problemas. En la capital era fácil encontrar papeleras atestadas de paraguas destrozados por la ventolera.

La Aemet indica que hubo rachas de viento de 77 kilómetros por hora en la capital en torno a las tres de la tarde, pese a que la velocidad del viento rondaba los 30. Sopló durante toda la jornada en dirección oeste. No obstante, esto hizo que un adorno se descolgara y cayera encima de las escaleras de la calle Nueva o que hubiera que retirar unas chapas en la Avenida de Madrid. En Baeza, donde la Aemet indica que se registraron rachas de 51 kilómetros por hora a las dos de la tarde, se desprendió la cubierta metálica de un edificio. Fue alrededor de las dos y media. Cayó en la Avenida de la Cruz Roja, lo que generó un corte de circulación e interrupciones en el suministro eléctrico y de telefonía móvil. Los Bomberos de Linares tuvieron que retirar una antena de televisión de la calle Blasco Ibáñez de Linares, mientras que los servicios de emergencia también intervinieron en la retirada de un póster telefónico que cayó en la A-6201 —en el kilómetro 6 en el término municipal de Sorihuela del Guadalimar— y otro póster, en esta ocasión eléctrico, en el kilómetro 4 de la N-323, en el término municipal de Bailén.

Un herido. El Servicio de Emergencias 112 informa de que un hombre resultó herido en una pierna después de que se desprendiera parte de una pared de tierra de una cueva dentro de una casa de Jódar. Fue en la calle Solís Ortega alrededor de las cuatro y media de la tarde. El herido fue trasladado al Hospital de Úbeda. Hubo que revisar la vivienda para comprobar que no sufría daños estructurales. Por otro lado, Villanueva de la Reina, una vez más, vio cómo se desbordaba el Arroyo del Encantado, lo que provocó que ocho calles del pueblo se llenaran de agua y lodo —Argentina, Francia, Perpetuo Socorro, Clara Campoamor, entre otras—. “Es lo mismo de siempre. Y eso que no ha habido una tormenta grande. Estamos a la espera de unas obras de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir que nunca llegan, pese a que son sencillas. Hay que encauzar un tramo que está junto a la vía y limpiar el cauce. Cada vez que llueve, los vecinos lo pasan muy mal porque temen que les entre en las casas. Por suerte, esta vez, solo llegó a las calles”, dice el alcalde de Villanueva de la Reina, Blas Alves. Hoy continuará lloviendo, aunque parece que menos que ayer. De todos modos, a mediodía se espera un apretón de agua. La Aemet mantiene activado el aviso amarillo por nieve en Cazorla y en Segura. De hecho, ayer ya se veían muchos parajes con un manto blanco.