Jaén recupera los turistas que perdió en la “gran depresión”

Atodos los sectores económicos de la provincia, la “gran depresión” económica lo lanzó a un “gran agujero”. La agricultura, acostumbrada a vivir en crisis casi permanentemente, se agarró fuerte para “trepar” y recuperarse. Las bajas cosechas internacionales y la vocación exportadora dibujó un buen horizonte de precios altos, por lo que se puede aseverar que ha avanzado, pese a la crisis. En cambio, hay otros, como la construcción, que todavía pelea para salir del pozo. Fue el segmento económico más golpeado en producción, rentabilidad y mano de obra. El turismo también comienza a ver la luz después de años difíciles.

La Consejería de Turismo publica que la actividad crece a un ritmo del 5% durante este año. De hecho, hasta el 1 de agosto —último dato oficial—, hubo 306.519 visitantes alojados en la provincia. De ellos, 258.919 eran españoles (un 4,6% más) y 47.600 extranjeros (un 6,4% más). Si se echa la vista atrás y se toma como referencia un año de crisis económica, como puede ser 2012, entonces llegaron 306.740 pasajeros en los ocho primeros meses del año. Ahora, la cifra resulta similar, pero está tomada hasta julio, es decir, con solo los viajeros de los siete primeros meses de 2017.

El verano. El estío no suele ser un buen mes para la provincia. Existe una cierta actividad, pero de viajeros que aprovechan las vacaciones para acudir a un destino concreto o que vienen a Jaén para disfrutar de las fiestas de los municipios —muchos de ellos son jiennenses que emigraron o hijos de ellos que quieren pasar unas jornadas en el pueblo—. Llegaron 46.699 turistas durante julio, lo que representa un aumento del 7,5% respecto al mismo mes del año anterior. Una vez más, queda claro que el sector se encuentra en plena recuperación.

No obstante, más allá de las positivas cifras de visitantes, no hay que perder de vista que la provincia tuvo una media de ocupación del 33% durante julio, lo que resulta bastante bajo, sobre todo, si se tiene presente que muchos otros destinos de la comunidad han estado muy cerca del completo durante muchas jornadas de este mes. De hecho, Jaén solo consiguió captar durante este mes de julio el 3% de los visitantes que llegaron a la comunidad. Además, si se miran las pernoctaciones, la cosa empeora, ya que Jaén solo capta el 1,4% de las habitaciones que se vendieron en julio en Andalucía.

Sin embargo, la estancia media comienza a crecer en Jaén. Se trata de un parámetro que suele estar bastante vinculado a la oferta turística que va más allá de los atractivos monumentales o naturales, que suelen ser los dos reclamos más importantes de la provincia. Cuando existen rutas, paquetes y actividades programadas, el visitante alarga la estancia, tal y como ocurre ahora. Y aquí tiene mucho que ver la evolución que ha experimentado la provincia, que ha avanzado mucho en profesionalización.

Si un turista se quedaba 1,8 días en 2012, ahora permanece 2,7, lo que representa un avance más que significativo. Cuando se repasan las pernoctaciones —las habitaciones que se venden en la provincia para un día— se ve con claridad que también existe un incremento significativo. De enero a julio se han comercializado 537.933 pernoctaciones —75.898 habitaciones en julio—, lo que representa un incremento del 7,3% en lo que va de este año. No hay que olvidar que este segmento creció al 6,1% en 2016, por lo que existe una evolución positiva, es decir, se crece aún con mayor ritmo que el año pasado.

Por otro lado, no existe mejor manera de medir la calidad de la oferta turística y el grado de satisfacción de los visitantes que con la nota media que ponen los visitantes a la provincia. La Consejería de Turismo afirma que valoran mucho el destino y le otorgaron —en 2017— una nota del 8,3 sobre 10. Supone un incremento respecto a ejercicios anteriores. De hecho, este indicador proyecta a la provincia con un notable que roza el sobresaliente. De ahí que buena parte de los visitantes opta por volver en el futuro.

el fin del año. De todos modos, los indicadores que ahora publica la Junta de Andalucía invitan a ser optimistas respecto al cierre de la temporada. Lo positivo está en que el sector ha mejorado considerablemente y mantiene unos importantes factores de crecimiento, aunque esto no puede disipar que Jaén capta todavía una parte muy pequeña del “pastel” turístico de Andalucía, que se ha convertido en un auténtico motor de desarrollo y empleo y un alivio para muchos municipios para recuperar sus empresas después de la depresión económica. Captar solo el 3% de los visitantes a la comunidad se antoja que resulta un porcentaje demasiado pequeño respecto a la cuota de las ocho provincias restantes.

Sin embargo, el tramo final del año se muestra como el más importante para la provincia. De ahí que el sector turístico tiene muchas expectativas depositadas en los meses de octubre, noviembre y diciembre. Jaén se “agarra” a los puentes y este año parece que le favorecerán en el calendario. Además de los atractivos naturales, el inicio de la temporada de caza será un importante revulsivo para la provincia. No obstante, le ocurre lo mismo que con la agricultura. El sector turístico depende mucho de la meteorología para plasmar las expectativas o no. De ahí que los hoteleros tienen claro que existe una tendencia positiva, pero que el cielo marcará lo que ocurrirá en los próximos meses, pese a que la evolución hace intuir que, a final de año, puede que se superen las cifras de visitantes, alojamiento y de facturación del año pasado.