Investigación e innovación para reforzar el olivar

El consejero de Agricultura destaca la aportación de la Ley del Olivar y las ayudas para encarar el futuro

29 sep 2018 / 11:53 H.

El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de Andalucía, Rodrigo Sánchez Haro, fue el protagonista de un nuevo desayuno coloquio del ciclo “Jaén, Nuevo Milenio”. Se trata del departamento del Consejo de Gobierno de Andalucía que más interesa a los jiennenses, sobre todo, si se mira desde un punto de vista económico y social, tal y como apuntó el presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Francisco Reyes, que fue el encargado de presentar al consejero. Esta edición se celebró en el Salón de los Cristales de la Institución Ferial, que se llenó para escuchar la ponencia de Rodrigo Sánchez Haro.

El director territorial de CaixaBank para Andalucía Oriental y Murcia, Juan Ignacio Zafra, fue el encargado de abrir el foro. Después, Francisco Reyes presentó al consejero antes de que este realizara su intervención. El coloquio llegó cuando el director de Diario JAÉN, Juan Espejo, se subió al escenario para lanzar las preguntas que escribieron los asistentes que así lo desearon en una tarjeta que tenían en sus mesas.

El consejero comenzó con una foto fija de la situación del campo: “Es necesario hacer una instantánea del sector. Según la primera estimación, el PIB ha crecido un 3,55% y la cuenta del sector jiennense es superior a los 1.300 millones de euros. La agricultura se acerca a los 10 puntos del PIB provincial, más los servicios que requiere. Hay 34.000 personas empleadas, con un incremento del 4,72%, Además, genera 1.700 millones, que hacen de Jaén la segunda provincia con mayor renta agraria. A todos se nos van los ojos al olivar, pero hay otros sectores que contribuyen a que Jaén sea referente, como el ganadero, un sector organizado que ha sabido concentrar la oferta y que logra diferenciar su producción por la calidad”. Además, Rodrigo Sánchez Haro continuó: “El olivar genera unos tres millones y medio de jornales, el 87% de la producción agraria, con 1.600 millones. Este año hemos tenido 390.000 toneladas. El olivar es un motor económico y de empleo y va a contar con todo el apoyo de la Junta y de la Consejería”.

El consejero aludió al trabajo que se ha realizado en los últimos años: “En 2011, aprobamos una ley específica y el resultado es el Plan Director del Olivar, con el que realizamos un diagnóstico que nos ha permitido saber dónde estamos y hacia dónde queremos caminar. También qué medidas tenemos que implantar, que deben ir encaminadas a mejorar la calidad de los aceites, incrementar la competitividad, mejorar la organización del sector, remunerar a todos los eslabones y proteger el suelo y la calidad paisajística”.

Precisamente, Rodrigo Sánchez Haro destaca la capacidad de innovación y la importancia de impulsarla a través de un subprograma en el que se aborda la transferencia del conocimiento y los ejes de futuro para el sector: “Muchas de estas medidas son una realidad. Para apoyar su desarrollo, en 2015 incluimos un subprograma del olivar que ha movilizado 255 millones, es decir, el 84% del presupuesto. También se han dado 94 ayudas millones en ayudas agroambientales. Innovar es una obligación y hay que asumirla para afrontar retos. Tenemos que estar bien informados en una sociedad que se mueve a más velocidad, pero tenemos que ser los primeros. Así convertiremos esos retos en oportunidades”.

Precisamente, Rodrigo Sánchez Haro insistió en la necesidad de trabajar para conquistar mercados en un sector fuerte, equilibrado y con futuro: “Tenemos que ser líderes con el olivar y estar a la vanguardia de la investigación y de la innovación. Trabajamos en la protección vegetal sostenible. También realizamos un esfuerzo especial con la Xylella, evaluando las cubiertas vegetales o en la aplicación ultrasonidos en la extracción de aceite. Tampoco nos olvidamos del panel de cata, del banco de germoplasma y de los avances en genómica dentro del banco de germoplasma del olivo, que es una referencia en el ámbito mundial para buscar variedades que sean resistentes, por ejemplo, a la Xylella”.

El consejero tampoco se olvidó de otros proyectos de innovación: “Tenemos que estar en primera línea de internet y big data. Lo hacemos, por ejemplo, en la distribución agrícola, en el análisis de cómo integrar los sensores de suelos y datas o, también, contra los ataques de mosca o buscar nuevas soluciones para el sector”.