Decadencia humana ante el capricho de la naturaleza

A la espera de que se materialice el proyecto de recuperación ambiental del entorno del Río Eliche, los visitantes se enfrentan a un complejo y peligroso acceso, así como a zonas llenas de basura

28 jul 2016 / 13:30 H.

Con el capricho de la naturaleza siempre antepuesto al del hombre, Los Cañones aún maravillan a quienes se aventuran a visitar este paraje único. Paredes de más de 200 metros de altura, impresionan. Y el sonido refrescante del fluir del Eliche, ilusiona. Mientras, restos de lo que fue obra del ser humano ofrecen un aspecto decadente hasta el punto de producir rechazo. Antiguas pintadas sobre un vetusto edificio “mellado” por todas partes reciben al visitante antes de comenzar a recorrer el cañón. La dejadez, el abandono, el vandalismo, las inundaciones son las causantes de la “defunción” del que fuera uno de los atractivos de la zona. Y es que, hace menos de tres décadas, aquello fue el bar La Trucha, en el que se podía degustar esta especie, criada en la cercana piscifactoría.

Como si se tratara de un “Caminito del vasallo”, la pasarela que ahora discurre y, que deja el río a la izquierda, tiene a su derecha el canal por el que se podían ver los peces criados en la piscifactoría. Hay quien se lamenta de que alertar del peligro que supone este recorrido se ha convertido en un “clásico”. Y no es para menos, pues, a pesar de las numerosas protestas de los residentes de la zona y de las reivindicaciones de los distintos representantes de la Asociación Puensi, del Puente de la Sierra, la realidad es que el acceso no es apto para fóbicos a las alturas y mucho menos para niños.

La falta de barandilla en algunos puntos del recorrido, incluso de la propia pasarela, la convierten en todo un desafío, que anima cuando se levanta la mirada para contemplar la gracia de la naturaleza, pero que enfurece al girar la vista la derecha para encontrarse con bolsas de leche, latas de gasolina o botellas de refrescos.

El túnel que enlaza la pasarela y que atraviesa la roca invita a confiar en la semioscuridad, iluminada con la escasa luz que intenta entrar desde las bocas. Si ojos que no ven es corazón que no siente, en este tramo, las sensaciones se centran en el frescor de la piedra, en las pisadas, para comprobar que no hay “nada raro”, y en agachar la cabeza. En el lateral, un canalón de piedra guarda todo tipo de desperdicios.

Con el río cada vez más cercano, la maleza no impide continuar por el camino, que conduce hasta bajar a los manantiales que el estrechamiento y ensanchamiento de roca regala a los bañistas. De hecho, son muchos los nostálgicos que vuelven para disfrutar de este enclave con su grupo de amigos o familiares, así como nuevos descubridores del encanto del paraje abandonado a su suerte. Y es que, especialmente en verano, las visitas a las aguas del Eliche son como una tímida peregrinación en la que los jiennenses vuelven a encontrarse a sí mismos, jugando y bañándose durante las vacaciones estivales de su infancia.

Escondido como el mejor de los tesoros, se trata de un espacio situado entre los municipios de Jaén y Los Villares, a 8 kilómetros de la capital y próximo al Puente de la Sierra. Desde el punto de vista técnico, este fenómeno de la naturaleza se trata de un encajamiento del río que, durante más de dos kilómetros, ha ido generando un gran cañón sobre materiales a base de sustratos de calizas, margas y margocalizas. A pesar de sus abruptas paredes, de más de doscientos metros de altura en algunos casos, las fuertes pendientes por encima del 70% en casi todo su recorrido y un complicado acceso, este paraje alberga una rica variedad de especies vegetales y animales que lo hacen único.

En los Los Cañones aparecen valores geomorfológicos de enorme interés, dada su excepcionalidad paisajística, ambiental y geológica. De ahí, que en el año 2007 fueran declarados como Paraje Natural de Excepcional Interés y como Monumento Natural.

Desde que, el pasado octubre de 2015, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) decidiera adaptar el proyecto inicial de mejora del paraje de Los Cañones de Río Frío a gran proyecto de restauración ambiental, las esperanzas de volver a disfrutar el paraje han animado a los jiennenses a volver. De hecho, ante el deterioro y la amenaza que sufre el entorno, en el que es habitual ver el cauce y la ribera del río llenos de basuras de todo tipo, algunos colectivos y grupos de amigos se movilizan para recoger los desperdicios. Y es que estos residuos constituyen un potencial peligro de contaminación.

proyecto . restauración ambiental

El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, anunció el pasado 19 de octubre que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, decidió adaptar el proyecto inicial de mejora del paraje de los Cañones de Río Frío, a gran proyecto de restauración ambiental. De esta forma, Sanz informó que la ampliación del proyecto que se había previsto inicialmente supondrá una mayor inversión por parte de la CHG. En este sentido, el titular autonómico aseguró que, de los 300.000 euros que se contemplaban en el proyecto primigenio, ahora la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir está en condiciones de destinar casi 750.000 euros. Igualmente, el delegado del Gobierno en Andalucía explicó que la intervención que se llevará a cabo pretende “dignificar” el entorno paisajístico de Los Cañones y que, para ello, la CHG realizará un “ambicioso” plan que contempla diversas ejecuciones.

expropiación . pasos para la recuperación

Según indica el alcalde en funciones, Miguel Contreras, el proceso de expropiaciones de los terrenos ya está iniciado, y es que parte de la intervención del proyecto de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) está previsto sobre parcelas privadas. En cuanto las ejecuciones contempladas en el proyectos se prevé acondicionar los caminos y las zonas de aparcamiento, así como la construcción de zonas de descanso y ocio (merenderos) o un quiosco-bar, al tiempo que se rehabilitarán o demolerán edificios existentes con el fin de convertirlos en miradores o aprovecharlos para fines recreativos.

También, está contemplada la limpieza y la regeneración del canal existente para que el agua vuelva a circular por el mismo. Además, se construirá una pasarela sobre el antiguo canal que sirva de paseo e interconexión entre miradores y zonas de interés paisajíistico, entre otras intervenciones. La iniciativa surge como solución al deterioro existente en un enclave privilegiado de este paraje de excepcional belleza.